miércoles, 30 de mayo de 2012

Crónica: "Zoológico de Cali, sinónimo de investigación, educación y conservación" por Juan José Molano, Maria Camila Sánchez y Alejandra Venegas

Cuatro décadas de historias contadas y aun quedan más años por contar.

Hace 40 años la Fundación Zoológica de Cali tomó en sus manos un parque en el que no había más que senderos de tierra, un kiosco y un inventario de 4 hojas donde estaba registrada una colección de 250 animales; la mayoría de ellos llamas, patos y tortugas. Hoy, además de celebrar su aniversario, cuenta con más de 3.000 individuos entre mamíferos, aves, reptiles, anfibios, invertebrados y peces de más de 200 especies: el 80% son nativos de Colombia y sólo el 20% es fauna exótica.

El Zoológico de Cali es una de las mayores atracciones turísticas de la ciudad, ha sido visitado por más de diez millones de personas y cuenta con tres centros de investigación los que han servido de ejemplo para otros parques del país. Además “es considerado como uno de los mejores zoológicos en América Latina, por el trabajo que se realiza en temas de educación e investigación para la conservación”, resalta María Clara Domínguez, directora ejecutiva del parque.

Más que una atracción turística

Hasta la fecha se han ejecutado y fomentando centenares de programas y proyectos que han aportado a la riqueza del patrimonio natural y cultural de la región. Ejemplo de esto es el programa de protección al Cóndor de los Andes, en el cual, dos ejemplares criados en el zoológico fueron liberados en el Parque Nacional de los Nevados en 1999. También el programa de reproducción de flamencos, en alianza con Corpoguajira para la preservación de estos. Ambos proyectos coordinados por Crea (Centro de Investigación de la Fundación Zoológica de Cali) que trabaja en torno al conocimiento para la conservación de especies.

Gracias a este centro investigativo se han desarrollado protocolos para la reproducción de animales. Actualmente el Oso de Anteojos es parte de este programa. “Ya la osa dió a luz y esperamos que en diciembre salga de su cueva para que todos conozcamos al nuevo miembro de la familia”, cuenta con alegría Gustavo Caicedo, jefe de alimentación y crianza del Zoológico de Cali.

Entre los espacios de investigación más representativos del zoológico se encuentran el Cafs (Centro de atención de Fauna Silvestre) que apoya a las autoridades ambientales en el manejo y cuidado de animales silvestres domesticados; “actualmente alberga 150 animales que provienen de distintos lugares del país” comenta Juliana Peña, jefe del Cafs. Y Cidzoo (Centro de Educación para la Conservación) encargado de desarrollar prácticas ambientales sostenibles, el cual, según Igino Mercuri, director de este centro, “aporta significativamente al fortalecimiento del Zoológico de Cali como un escenario de formación cultural y ambiental ciudadana”.

Calidad humana

“Ninguno de nosotros es tan inteligente como todos nosotros juntos” este proverbio japonés hace referencia a las 160 personas que trabajan diariamente en las instalaciones del parque. Maria Clara Domínguez revela que el proceso para levantar el lugar ha sido largo y doloroso pues en los inicios de la administración de la Fundación Zoológica de Cali, no se contaba con el apoyo del municipio ni con recursos, además el personal no estaba capacitado y eso traía dificultades en la organización y mantenimiento.

Ahora las cosas son distintas pues “contamos con un equipo técnico de alta calidad, apasionado por lo que hace, el zoo de Cali fue un lugar por el que nadie daba nada hace algunos años pero el trabajo duro, y gente que sabe lo que hace y para donde va, ha facilitado la labor que realizamos” afirma.

Lo que lo hace diferente 

En Colombia existen cuatro parques más de este tipo ubicados en Barranquilla, Pereira, Medellín y Cundimarca, pero es precisamente el Zoológico de Cali el que está posicionado como el primero del país. Esto se debe a que tiene la mayor cantidad de habitantes, un mariposario que alberga más de 800 especies de mariposas y permite observar su proceso de metamorfosis, un mundo acuático que se puede conocer gracias a sus 10 acuarios de agua salada y 9 de agua dulce.

Posee un aviario adaptado al bosque húmedo tropical, además de reptiles, anfibios, mamíferos, entre otros; ubicados estratégicamente para un recorrido agradable en una extensión total de 25 hectáreas. Todo esto, acompañado con el paso sonoro de un río que rodea el lugar y de una gran variedad de plantas coloridas y árboles de hojas verdes y gigantescas raíces.

Por otra parte el parque es el único del país que cuenta con los 3 centros de investigación mencionados, una clínica veterinaria interna con la más alta tecnología y el personal mejor capacitado para cada una de sus áreas. En la parte de recreación existen varios programas que además de crear para los visitantes experiencias inolvidables, trabaja en un cambio de actitud y responsabilidad con los recursos naturales. Entre ellos se encuentra el curso de verano que tiene 20 años y es uno de los mejores en Colombia, también cuenta con personal capacitado para guías escolares y fiestas infantiles.

Nuevos proyectos en el horizonte 

Actualmente son dos los retos que enfrenta el Zoológico de Cali, el primero es un proyecto llamado Suruma, un parque que se construye en Mocoa, en la selva amazónica por encargo de Corpoamzonia “será el primer parque sobre la selva Amazónica y sus saberes” mencionó Maria Clara Domínguez, además cuenta con emoción, que el nombre que lleva el proyecto es un vocablo derivado de la lengua indígena Witoto, que nombra a la danta como un animal emblemático de la Amazonía.

El segundo es la construcción de una nueva exhibición en el parque, Jaquizima (también de la lengua Witoto que significa los hombres de la selva). “Será la exhibición de primates mas importante en América Latina, tendrá más de mil metros cuadrados y 6 especies de primates”, concluye. Este importante proyecto planea mostrar los primates más representativos del bosque húmedo colombiano.

Allí se podrá observar cómo convive la gente con estos animales. Las expectativas son muchas pues es una obra que tiene un costo estimado de 800 millones de pesos y La fundación Zoológica de Cali sigue en busca de apoyo para sacar adelante esta iniciativa.

Además de animales, el Zoológico de Cali contiene miles de historias que surgen en una oficina pequeña con más de 15 personas que se animan a escuchar y contar sus anécdotas. El ambiente se vuelve ameno cuando más personas llegan y se sientan cómodamente, para darse un respiro de su trabajo y recordar con alegría los inicios del parque. Así es como se conocen las historias de Carlitos, la tortuga galápagos de 150 años que murió hace tres años, de Griselda, la osa que fue el primer animal en llegar al parque o de Inés, la chigüira que hacía un trampolín con el caparazón de Carlitos para saltar el muro y escapar.

Con el paso de los años el Zoológico de Cali ha evolucionado y se ha vuelto no sólo un lugar de recreación, sino también de educación e investigación. Sus senderos tienen marcados los pasos de inolvidables experiencias pues así como mencionan en su libro Pasión Por La Vida: “el zoológico no sólo está ubicado en un punto geográfico, está en el recuerdo de más de 10 millones de personas que lo han visitado por eso en nuestras taquillas no vendemos boletas, entregamos pasaportes para conectarse con la vida…”.

Estos trabajos han sido realizados por estudiantes del Taller de Comunicación Prensa, del 4° semestre del Programa Comunicación Social-Periodismo, orientado por la docente Yenny Viviana Cruz Pérez. Los productos hacen parte de la iniciativa de investigación en el aula denominada: Cali y sus contextos, llevadas a cabo en el período enero-mayo de 2012.



0 Reactions to this post

Añadir Comentario

    Publicar un comentario